martes, 13 de octubre de 2015

Libro: la mujer en el mundo indígena mexicano...

LIBRO:

El papel de la mujer en el mundo indígena mexicano.

 Una aproximación desde las fuentes coloniales y la poesía indígena contemporánea




FIESTA DE LA UNIDAD PARROQUIAL

Wilfrido Ahedo Ángeles, alumno de filosofía de la UIC de la materia Antropología de las Religiones,  nos presenta este escrito de su autoría, acerca de LA FIESTA DE LA UNIDAD PARROQUIAL, en la parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe en Ajacuba, Hidalgo.
Para contactar al autor: willyahngel@hotmail.com
Contacto con la parroquia vía Facebook:
Parroquia Ntra Sra De Guadalupe Ajacuba





Diócesis de Tula A.R.

Parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe

Ajacuba Hidalgo

 
   F I E S T A  D E  L A  U N I D A D 
   P A R R O Q U I A L

 

En la Iglesia universal en el año 2004 el Papa San Juan Pablo II, convoco a vivir el año internacional de la Eucaristía bajo el lema: “LA EUCARISTIA, LUZ Y VIDA DEL NUEVO MILENIO”. Y coincidió con el Congreso Internacional de la Eucarística.

Conjuntamente con nuestra Iglesia Local de Ajacuba, fuimos convocados por el entonces P. Emilio Zaragoza Lara que fungía como párroco y como vicario en ese entonces Diác. Edgar Pérez, con el apoyo de las Hermanas de los Sagrados Corazones de Jesús y María, nos convocó a clausurar el año de la Eucaristía en la parroquia, después de la misión de verano, el último domingo de Julio de 2004,

La clausura del año de la Eucaristía fue de dos días; el sábado por la noche se realizó por primera vez una procesión con el Santísimo por el circuito de la cabecera parroquial concluyendo con la misa a las 7 de la noche; al siguiente día domingo conto con la presencia de todas las comunidades que venían a la cabecera parroquial con las imágenes de sus respectivos Santos patrones, en la mañana teniendo un punto de reunión en la entrada del hoy actual centro de salud de Ajacuba, donde partieron todas las comunidades hacia el pueblo de Ajacuba.

En el arco de Ajacuba se les esperaba con los patrones de Ajacuba ‘la Virgen de Guadalupe, El Cristo de Santa Teresa y la Virgen de Santa Jacoba en el Arco de la entrada de Ajacuba y la comunidad de Ajacuba; se saludaba a cada comunidad y a la imagen de estas seles incensaba y se les imponía una cuelga en señal de recibimiento y respeto al patrón y a la comunidad por el Oratorio de danzantes de Apaxco representados por la Profesora María Luisa Correa de Ajacuba,  ese fue un gran domingo en la cual la comunidad parroquial se reunía por primera vez,; teniendo como invitados especiales al curso introductorio del seminario de Tula y el Ballet “Ollin Azteca” de Ajacuba.

         La organización de la primera clausura fue una prueba y cáliz, que se fue perfeccionando, como anécdota la primera vez soló la comida no alcanzo ya que se esperaban mil personas y llegaron más; tiempo después los agentes de la parroquia, las religiosas, reunidas con el P. Emilio evaluaban el evento de la Clausura del Año de la Eucaristía y comentaban “Que fue muy bueno, que bueno que se hiciera de nuevo”, entre otras opiniones.

         Se tomó la determinación de volverla a realizar es entonces que se les preguntó a las comunidades que si estaban dispuestas a volverla a hacer a lo que ellos respondieron que sí, a través de los años cada comunidad ha dado lo mejor de sí para esta reunión y la primer valiente después de Ajacuba fue Tulancalco, la comunidad más lejana de la parroquia que levanto la mano para organizar la siguiente fiesta del 2005.


El nombre de la “fiesta de la unidad parroquial”


         Cada año se quería volver a vivir esta fiesta o reunión de las comunidades, fue donde el entonces párroco Emilio invitaba a los agentes a buscar un nombre para esta reunión que se llevaba los últimos fines de agosto y se determinó esta fecha porque en la parroquia se llevaban las semanas de misiones de verano en cada una de las comunidades, la misión de verano consistía en que una semana en todas las comunidades de las parroquia se dieran temas relacionados al catecismo y al crecimiento de la fe de las personas.

         En las reuniones de la Misión de Cuaresma se preguntó a todos los agentes sobre qué nombre llevaría la reunión y con ayuda del P. Emilio y las hermanas se tomó el nombre  de La Fiesta de la Unidad Parroquial. De las personas que se reúnen con un único fin celebrar la amistad y la unidad de ser Parroquia en Jesús con la protección de Santa María de Guadalupe.

         Teniendo como bases, que cada año se cambiaría la sede de esta fiesta que hasta el día de hoy se ha hecho así, que la comunidad que recibe se encarga de ofrecer los alimentos en señal de unión con los demás fieles que los visitan, que cada comunidad tendría un color para identificarse. Esto fue un principio, tiempo después, el P. Edgar ya siendo párroco pidió a cada comunidad ser creativos, es entonces que cada comunidad y grupo de la parroquia presenta un numero artístico ya sea bailable, obra de teatro, alguna poesía, lo que fuera para esta fiesta y así muchas y muchos niños, jóvenes, adultos y personas mayores de edad han dado lo mejor de sí cada comunidad.
 

EL día de la fiesta de la Unidad

         La fiesta de la unidad está llena de signos, el día de la fiesta. Todo inicia en la mañana en cada comunidad que toca las campanas y hecha cuetes para reunirse en su propia capilla y salir en caravana a la comunidad anfitriona con su color respectivo, al llegar a la comunidad anfitriona se reúnen en el punto de llegada y como llegan se forman con sus santos patrones, teniendo en cuenta que este día la alegría caracteriza la gente.

Comienza la procesión a la llegada se oyen cantos, se hacen presentes los adornos, se hace presente la cultura en el arte de los arcos, las cuelgas, el incienso, el matrimonio, la mayordomía o el comité de la fiesta de la unidad, las imágenes, El desayuno, la comida que se hace en el trascurso de la fiesta, el desayuno es el primer convite de la mañana que las mujeres y hombres de la comunidad lo hacen con gusto y comparten.

La procesión inicia cuando la última comunidad ha recibido los honores en la imagen de su patrón con la cuelga, esta es impuesta por un matrimonio de la comunidad y se inciensa con un sahumerio u asomado por la abuela de la comunidad, el humo que expide sube a Dios en acción de gracias por la visita de la comunidad. La cuelga es honor y el incienso es purificación y veneración para el santo que viene, la comunidad que recibe con este símbolo da el recibimiento a la comunidad

La procesión se encabeza por la cruz de la misión y por el fuego de los jóvenes de la carrera Antorchistas que traen desde algún punto o desde alguna parroquia cercana, que inician llevando el fuego que presidirá la fiesta y que simboliza verdad, vida y unidad en la alegría, que sirve también para pasar la estafeta de la luz para preparar la fiesta de la unidad del año que viene.
 
El primer convite es el desayuno que ofrece la comunidad a las más de cinco mil personas que llegan ese día, y la segunda convivencia es la comida y se prepara en el trascurso de la fiesta para repartirse después de la Santa Misa. El Desayuno y la comida la comienzan a preparar con donaciones de la comunidad y la misma comunidad se ofrece para servir, se hacen grandes cantidades de arroz, carnitas, salsas, tortillas, agua o refresco, atole, café, pan, tamales.


 


Durante el trascurso cada comunidad tiene una participación importante con un canto, baile, poesía, obra de teatro, que se prepara desde meses antes para presentarlos a la comunidad, de estos momentos de alegría sale el ballet parroquial que es denominado Mazehuani teotl o danzante de Dios.

Luego viene la parte más importante y donde llega mucho más gente de todas las comunidades a participar de la Santa Misa, esta celebración es de alegría y de gozo, los cantos son alegres, y es una organización para esta liturgia con presencia de sacerdotes de parroquias y congregaciones, en las ofrendas se ofrece lo propio de la región entre ello lo que caracteriza a la comunidad como maíz, pero hay un signo que se les da a la comunidad como recuerdo de participación, a la vez de que la comunidad anfitriona entrega la luz a la comunidad que el año próximo tendrá la fiesta de la unidad.

          
 

Sem. Wilfrido Ahedo Ángeles

Misionero del Sagrado Corazón.

27 de Septiembre de 2015

 

Parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe

Ajacuba, Hgo.

 

11° FIESTA DE LA UNIDAD PARROQUIAL

COLONIA CUAHUTEMOC





















































 
 
FOTOGRAFÍAS cortesía de: Wilfrido Ahedo Ángeles